Las miniseries son, desde hace meses, las más elegidas por los usuarios y ahora, en Amazon Prime Video, llegó la opción perfecta: Supernova. Esta tira cuenta con tan solo cuatro episodios de media hora cada uno que, si bien podrían haber sido una película, tienen una estructura narrativa que encaja perfectamente con el relato episódico. Y así es cómo queda en evidencia el gran acierto de Ana Katz, su directora, en términos de guion.
Asimismo, en esta ocasión, Supernova muestra una nueva versión de la dirección de Katz: atrás deja un solo protagonista de la trama y ahora incluye a tres. Nicolasa (Johanna Chiefo), Mimí (Carolina Kopelioff) y June (Ruggero Pasquarelli) son tres amigos que atraviesan problemas de salud entablados con una crisis de los 30 en donde sus vidas son cada vez más complicadas. Con un desarrollo espléndido de cada una de las historias, la serie muestra relatos que bien podrían ser reales y que dejan miles de enseñanzas.
La protagonista principal de esta historia es Nicolasa, el personaje de Joahnna Chiefo, quien también se desarrolló como productora y generadora de la idea original de Supernova. Este personaje trabaja como modelo XL que se la pasa yendo de un casting a otro, pero como le resulta difícil encontrar trabajo de esto, en su cotidianeidad vende empanadas tucumanas por los negocios de su barrio. Pero, entre todos estos altibajos laborales, también se enfrenta a una mala relación con su padre.
En el grupo de tres amigos también está June, el personaje de Ruggero Pasquarelli, quien es un diabético que no puede enfrentar su enfermedad. Por eso, descubre un grupo online de personas que creen que la solución está en comer papaya. Este combo raro de soluciones que encuentra para sentirse mejor lo termina acercando a José, el verdulero de su barrio con quien tiene una clara atracción sexual. Y, este personaje, se irá desarrollando entre sus amoríos, su diabetes y la mala relación con su padre que no acepta su sexualidad.
Por otro lado, la tercera protagonista es Mimí, quien es interpretada por Carolina Kopelioff. Este personaje es una actriz e influencer muy famosa que vive pendiente de su relación con un hombre mucho más grande que ella, quien está casado y con dos hijos. Asimismo, también se enfrenta al poco apoyo familiar siendo su madre su único sostén y a quien le cuesta mucho despegarse de ella. Por eso, cuando aparece un tic nervioso en su vida, el cual la hace pestañear todo el tiempo, se ve obligada a poner un alto y replantearse su vida y carrera.
Los protagonistas, a pesar de que enfrentan distintas adversidades en sus vidas, siempre comparten juntos un momento de paz y que los devuelve a la realidad. Además, con el correr de los episodios, Supernova desarrolla en su debido tiempo la vida de estos personajes. Por su parte, Nicolasa le hace frente a la gordofobia tras ser catalogada por una publicidad. Mimí plasma la perfección a lo que, por lo general, son sometidos los actores y su deber a no equivocarse. June es un chico perdido que no es aceptado por sus padres y se enfrenta a una desconfianza casi total sobre él mismo.
Con tres interpretaciones alucinantes, es muy fácil conectar con los problemas de cada uno ya que, todo lo que expresan lo hacen con una fluidez narrativa agradable que genera empatía. Sin dudas, Supernova logra ser ese relato de la realidad que, a veces, es tan necesario, pero alejándose del relato banal de la vida de tres jóvenes de 30 años a los que la salud y los problemas familiares le dan una advertencia.
De todas formas, hay que destacar que en ciertas escenas y momentos, Supernova abusa del humor y el sonido no es del todo claro. Pues, en varias ocasiones, los protagonistas no llegan a entenderse ya que falla el sonido de sus voces con el de ambiente. Aunque, a decir verdad, al ser un relato de vida en Buenos Aires, la conocida como ciudad de la furia, es normal que cosas así sucedan. Pero, más allá de eso, esta tira disponible en Amazon Prime Video tiene más para triunfar que perder.