El Origen sigue la historia de Dom Cobb, interpretado por Leonardo DiCaprio, que es un ladrón, prófugo de la justicia estadounidense, por el supuesto asesinato de su esposa, especializado en infiltrarse en los sueños de las personas para robar ideas, claves de bancos o cualquier elemento de valor mientras sus víctimas duermen. ¿Cómo lo logra?
A través de un sueño inducido por un dispositivo de tecnología militar experimental, que administra un potente sedante a las víctimas y a los atacantes, Cobb crea un sueño compartido en el que cada uno de sus compañeros de equipo juega un rol significativo en la ensoñación de su víctima que se ve superado por estas personas y al final del día no tiene oportunidad alguna de mantener sus secretos a salvo.
Ya pasaron más de diez años desde el estreno de El Origen y no son pocos los que la señalan como una de las mejores películas de Christopher Nolan. En Rotten Tomatoes el film que cuenta en su reparto con figuras como Tom Hardy, Joseph Gordon-Levitt, Cillian Murphy y Ken Watanabe, entre otros, tiene un 87% de aceptación de parte de la crítica especializada contra un sólido 91% de las audiencias en general.
El final de El Origen: ¿confuso?
El final de El Origen muestra a Cobb llegando a Estados Unidos, donde la ley no iba a dejarlo aterrizar, pero en el desenlace podemos ver claramente que el personaje de Leonardo DiCaprio llega a Norteamérica y se encuentra con su familia sumando un detalle final que es lo que vuelve locos a los fans del film desde que se estrenó en cine: la perinola del protagonista, ese elemento con el que podía discernir si se encontraba despierto o en un sueño, es puesta a girar pero no la vemos caer, razón por la cual no hay una respuesta definitiva más allá de la que podemos suponer.
Christopher Nolan habló con Wired y dijo al respecto: “El final de El Origen es exactamente eso. Hay una visión nihilista de ese final, ¿verdad? Pero, también, él siguió adelante y está con sus hijos. La ambigüedad no es emocional. Es intelectual para la audiencia”. El nihilismo supone una filosofía en la que nada importa, razón por la cual podemos conjeturar que este desenlace tiene su estructura en la mente de cada espectador. Actualmente el cineasta se encuentra promocionando Oppenheimer que llegará al cine el 20 de julio.