Pasaron dos años desde que Armie Hammer enfrentó una serie de acusaciones de abuso sexual y canibalismo. Desde aquel entonces, su vida como estrella de Hollywood ha tenido un punto final, puesto que fue despedido de su agencia y buena parte de sus proyectos se vieron cancelados. Pero, por primera vez, el actor rompió el silencio y contó su versión de los hechos, revelando incluso que contempló el suicidio y que él mismo fue abusado a sus 13 años por un pastor.
En diálogo con Air Mail, Hammer contó cómo atravesó la exposición pública y admitió que adoptó conductas abusivas con sus exparejas. Si bien el Departamento de Policía de Los Ángeles inició una investigación, el intérprete de The Social Network negó los actos delictivos e hizo énfasis en que su interés por algunas prácticas sexuales se originaron tras ser abusado en su infancia.
Acerca del pastor, explicó: “Eso introdujo la sexualidad en mi vida de una manera en la que estaba completamente fuera de mi control. Yo me sentía impotente en esa situación”. Y agregó: “La sexualidad fue presentada de una manera aterradora, por lo que mi interés está enfocado en querer controlar la situación”.
+ Armie Hammer relata su intento de suicidio
La vida de Armie Hammer ha tenido un vuelco desde las acusaciones: trabajó como vendedor en las Islas Caimán y pasó su tiempo en un centro de recuperación. Sin embargo, admitió que consideró la idea del suicidio mientras se encontraba allí: “Simplemente salí al océano y nadé lo más lejos que pude con la esperanza de que me ahogara, me golpeara un bote o me comiera un tiburón. Entonces me di cuenta de que mis hijos todavía estaban en tierra y que no podía hacerles eso”.
Sobre las denuncias de Courtney Vucekovich y Paige Lorenze, el actor reconoció haber abusado emocionalmente de ellas. “Tenía a estas mujeres más jóvenes de veintitantos años, y yo tengo treinta y tantos. Yo era un actor exitoso en ese momento. Podrían haber estado felices de estar conmigo y habrían dicho que sí a cosas a las que tal vez no habrían dicho que sí por su cuenta. Eso es un desequilibrio de poder en la situación”.
Por último Armie Hammer sostuvo: “Estoy aquí para reconocer mis errores, asumir la responsabilidad por el hecho de que fui un imbécil, que fui egoísta, que usé a las personas para hacerme sentir mejor y, cuando terminé, seguí adelante”. Y concluyó: “Ahora soy una persona más sana, más feliz y más equilibrada. Puedo estar allí para mis hijos de una manera que nunca estuve. Estoy verdaderamente agradecido por mi vida y mi recuperación y todo. No volvería atrás y desharía todo lo que me pasó”.