En 2016, cuando Netflix la sumó a su catálogo, The Crown se convirtió en una de las mejores series sobre la realeza británica. Su puesta en escena, la caracterización de sus personajes y las impecables actuaciones llevaron a que Isabel II sea una de las primeras en verla. Pero, a medida que pasaron las temporadas, los Windsor colocaron a la serie en su “lista negra” ya que Peter Morgan se encargó de contar su historia sin ningún tapujo.
Tal es así que más de una vez desde el Palacio de Buckingham han intentado que Netflix aclare que The Crown no se trata más que de una ficción. Y, si bien Morgan se ha tomado ciertas licencias creativas en varias ocasiones, la realidad es que la mayoría de las cosas que cuenta son muy cercanas a lo que ha sucedido en la historia, por lo que nunca cumplieron con el pedido de los aristócratas. Es por eso que, ahora, ningún miembro de la familia mira la serie ya que es una ofensa para ellos.
Esto claro, exceptuando al miembro de la monarquía más polémico: el Príncipe Harry. El hijo menor de Lady Di y el Príncipe Carlos declaró, más de una vez, que ha visto The Crown y que, a pesar de que es ficción, “se acerca mucho a la realidad”. Y por eso, el duque de Sussex se convirtió en uno de los favoritos de la producción de Netflix ya que es el único que habló bien al respecto. En consecuencia, la serie nunca se atrevería a hablar mal de él o menos a animarse a contar quién fue el miembro de la monarquía que discriminó a su primogénito, Archie.
El pasado 7 de marzo, el Príncipe Harry y Meghan Markle se sentaron junto a Oprah Winfrey para dar su primera entrevista tras el Megxit, término que se le otorgó a su salida de la casa real británica. En este reportaje los duques no sólo hablaron de su experiencia, sino que mencionaron que antes del nacimiento de su primer hijo, Archie, había un miembro de la familia que estaba preocupado por el tono de piel que tendría el pequeño. Esta bomba explotó en todo el mundo, pero para no ir por más ninguno quiso mencionar quién era el culpable.
De todas formas, los secretos no duran mucho en un ámbito tan polémico como el de la monarquía y recientemente se ha conocido quién sería el culpable. Más de una vez se dijo que fue el Príncipe William, hermano de Harry, el que lanzó aquél comentario discriminatorio, pero la realidad es que fue su padre, el Príncipe Carlos. En el libro “Brothers and wives: inside the privates lives of William, Kate, Harry and Meghan”, el periodista Christopher Andersen fue quien reveló la información.
Según lo que contó, cuando se hizo público el compromiso de Harry y Meghan en 2017, Carlos de Gales le habría dicho a su esposa, Camilla Parker Bowles: “me pregunto cómo lucirá su primer hijo”. Y, por lo que contó el periodista, la duquesa de Cornualles quedó sorprendida por la pregunta y no dudó en responderle: “bueno, absolutamente hermoso, estoy segura”. Pero, al parecer el Príncipe habría ido por más lanzando la siguiente frase: “me refiero a cómo crees que será la piel del niño”.
De momento, Harry y Meghan no se han pronunciado sobre esto, pero sí salió un comunicado del Palacio de Buckingham. Mediante el vocero oficial de los Windsor, el Príncipe se defendió y dijo: “esto es ficción y no vamos a hacer ningún otro comentario”. Aunque, quienes seguro sí dirán la verdad serán los duques de Sussex si es que en algún momento se atreven a hablar de ello.
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