La Guardia Costera de Estados Unidos ha dado por muertos en las últimas horas a los cinco tripulantes que iban a bordo del Submarino Titan luego de que uno de los robots desplegados en la zona encontrara restos materiales a 500 metros del Titanic. La expedición estaba a cargo de OceanGate, reconocida empresa estadounidense.
Según confirmaron en las últimas horas, el submarino se rompió a consecuencia de una “catastrófica implosión” por la presión sobre la cabina. Este fenómeno cósmico sucede cuando un objeto colapsa o se destruye violentamente hacia adentro debido a una presión exterior mucho mayor que la que hay dentro del objeto.
El submarino tuvo que enfrentarse a una presión creciente desde afuera debido a que cada vez estaba más sumergido ya que se había perdido el control del mismo. Aunque este tipo de transportes están preparados para navegar en el océano, no pueden soportar demasiada profundidad o problemas con fallas estructurales.
En las últimas horas se confirmó que son cinco las personas fallecidas: Stockton Rush, Hamish Harding, Paul-Henri Nargeolet, Shahzada y Sulaiman Dawood. El primero que mencionamos era piloto, buzo profesional y presidente-fundador de OceanGate, la compañía que lideraba este viaje.