Adaptar un libro que ya ha cosechado miles de fanáticos alrededor del mundo no es tarea fácil, pero Prime Video y todo su equipo lo han logrado con Culpa Mía. El escrito de Mercedes Ron llegó a la plataforma hoy en formato de película y, a pesar de que tiene algunas diferencias, la producción ha logrado captar la esencia de esta emocionante historia llena de pasión, acción, amor prohibido y violencia.
Protagonizada por Nicole Wallace y Gabriel Guevara, Culpa Mía sigue la historia de Noah (Wallace), una joven que vive sola con su madre, Rafaella (Marta Hazas), pero cuando ésta se casa se ve obligada a mudarse al hogar de su adinerado esposo, William Leister (Iván Sánchez). Allí Noah conoce a Nick (Guevara), su hermanastro y, a pesar de que en un principio su relación es agobiante y estresante, poco a poco el amor se apodera de ellos.
Es en ese momento donde comienza una historia apasionante y atrapante. Salvando las diferencias que tiene con el libro, el cual es mucho más detallado en ciertos aspectos, Prime Video ha captado la adrenalina de esta trama a la perfección. Aunque también lo han logrado Nicole Wallace y Gabriel Guevara con su innegable química dentro y fuera de cámaras. Los actores, que se conocen desde hace años, son una combinación perfecta de, en palabras sencillas: el chico malo y la chica aplicada que quiere salvarlo de todos sus males.
De todas maneras, quién la terminó salvando es él a ella y no en sentido metafórico, sino verdaderamente. ¿Por qué? Justamente porque Culpa Mía tiene ese costado en el que, además de retratar una historia de amor prohibido, malas decisiones y mucho crecimiento emocional para ambos protagonistas, también en un duro reflejo de la violencia física y los traumas emocionales que esto puede dejar.
Durante la película Noah se muestra como una chica fuerte, empoderada y muy capaz de afrontar a Nick a pesar de todo lo que esto implica. Y ese es un gran trabajo que hace Nicole Wallace a la hora de retratar esta personalidad de su personaje. Sin embargo, en ciertos aspectos, sus peores traumas salen a la luz ya que, luego de haber soportado actos de violencia familiar, hay cosas que no quiere volver a repetir.
Es por eso que, cuando los mismos van quedando en evidencia, Nick es el único que puede salvar a Noah de todos sus males. Así es cómo queda reflejado no sólo el gran trabajo de Nicole Wallace al retratar a una persona traumada, pero fuerte gracias a esas malas experiencias, sino también el de Gabriel Guevara al interpretar a un intento de chico malo, pero con sus propias debilidades.
Además, la realidad es que entre ellos hacen una dupla explosiva y diferente. Eso sí, la suma de Iván Sánchez, Marta Hazas, Víctor Varona, Iván Massagué y Fran Berenguer ha sido un complemento perfecto para relucir la historia principal con un entorno acorde al desarrollo de la trama.
Pero, claro está, este desarrollo de cada personaje no hubiese sido posible sin el guion tan fluido, audaz y arriesgado que tiene Culpa Mía. Si bien sí, es una película basada en un libro, también tomó su propia perspectiva en algunos momentos. Por ejemplo, cada escena de violencia está tan perfectamente guionada y retratada que hasta parece real, logra emocionar y en cierto punto entristecer a uno como espectador.
De hecho, eso mismo me ha sucedido a mi. En mi caso, yo disfruté el metraje desde otra visión: como una persona que sufrió violencia. Rearmar una vida después de tales traumas no es fácil, por eso, me fue tan sencillo empatizar con Noah, con Gabriel y todos sus dramas. Que eso, en efecto, más allá de las grandes actuaciones, se consigue con un libreto sublime como es el de esta producción.
Eso sí, debo decir que más allá del impecable trabajo que hay detrás de esta cinta, en varias ocasiones se me ha transformado en una historia cliché, pero llevadera. Esto es justamente porque sabe combinar el romance prohibido clásico, con la acción, el drama y, por supuesto, una música espectacular que la hace aún mejor.
Y, a pesar de que me ha recordado, más de una vez, a las típicas escenas de Rápidos y Furiosos, con sus bandas, sus carreras y toda la puesta en escena de cada momento, Culpa Mía tiene un gusto propio siendo un cóctel narrativo emocionante y atrapante. Servido al ritmo de la música urbana, la mejor amiga de las generaciones actuales, esta producción es impecable para aprender a manejar la ira, entender sobre el romance prohibido y, por supuesto, de los traumas emocionales de la violencia.