La película más esperada del año ya está en los cines de todo el mundo. Y sí, hablamos de Spider-Man: No Way Home, la tercera película del Hombre Araña protagonizada por Tom Holland que llegó como la gran apuesta de Marvel y Sony Pictures. Entre las figuras de su elenco, hay una actriz que supo destacarse en cada una de las entregas: Marisa Tomei. Al parecer, la artista tuvo una propuesta muy innovadora para su personaje que finalmente se descartó.
A lo largo de sus 57 años, la intérprete estadounidense supo brillar en cine, teatro y televisión para recibir el reconocimiento de la crítica y los especialistas, que la llevaron a alzarse con un premio Óscar, así como también de los fanáticos del Universo Cinematográfico de Marvel que la recibieron muy positivamente cuando inició su trabajo como la Tía May Parker. Es que si bien era un personaje conocido en las películas antecesoras de Spider-Man, ella supo encontrarle una nueva mirada.
De esta manera, se convirtió en uno de los personajes favoritos de la trilogía de Tom Holland. En el marco de la presentación de la última película, la actriz mencionó sobre el romance que mantiene su papel con el de Happy Hogan, el rol en manos de Jon Favreau que comenzó como un asistente y amigo de Iron Man, para convertirse en la pareja de la tutora de Peter Parker en las primeras dos películas del MCU.
A diferencia de lo que hemos visto en las versiones de Tobey Maguire o Andrew Garfield, aquí no se presenta en pantalla al Tío Ben por el que su personaje queda viuda. Muy distinto a lo que la franquicia de superhéroes ha presentado anteriormente, en este caso se desarrolla su nuevo romance con una perspectiva, quizás, mucho más cómica. Incluso antes de que se tomara esa decisión, la actriz les presentó a los productores una historia mucho más innovadora.
“Antes de que apareciera la idea de Happy, hubo un momento en el que yo me sentí como: ‘¿May podría estar con una mujer porque Ben no está? ¿Con quién debería estar?’ Así que estábamos hablando de eso”, comenzó diciendo Marisa Tomei. Y sostuvo: “Yo realmente quería que Amy Pascal, la directora de Sony, fuera mi novia. Le dije: ‘Nadie tiene que saberlo, Amy. Yo solo estaré en una escena contigo. Será algo sutil’. Pero nadie lo hizo en ese momento”.