Desde su salto a la fama, Christian Bale ha sabido convertirse en uno de los actores más queridos de Hollywood. Es que no solo ha interpretado personajes entrañables como Batman, sino que además ha demostrado un importante compromiso a la hora de protagonizar cualquier tipo de historia. Los cambios físicos extremos no son un problema para él y la audiencia sabe reconocerlo. Recientemente estrenó Los crímenes de la Academia en Netflix y quienes aún no la han visto se preguntan: ¿ha tenido algún tipo de transformación para el film?
Aunque lleva solo un día en el catálogo de la plataforma de streaming, la película dirigida por Scott Cooper -que se basa en la novela homónima de Louis Bayard- ya ocupa un puesto en el ranking de las más vistas. No es para menos: además de una historia atrapante, comparte reparto con aclamadas estrellas de la talla de Gillian Anderson, Lucy Boynton, Charlotte Gainsbourg, Toby Jones, Harry Lawtey, Simon McBurney, Hadley Robinson, Timothy Spall y Robert Duvall.
¿De qué se trata exactamente? La historia se ambienta en 1830 en West Point. Su sinopsis oficial explica: “Un inspector cansado de la vida recibe el encargo de investigar, con la máxima discreción, el espantoso asesinato de un cadete”. Y agrega: “Frustrado por el código de silencio de los cadetes, recluta a uno para que lo ayude a esclarecer el caso, un joven al que el mundo acabará conociendo como Edgar Allan Poe”.
Christian Bale ha deslumbrado con papeles en American Psycho, que le requirió suprimir los hidratos de carbono, enfocarse en las proteínas y llevar un duro entrenamiento, así como en la trilogía de Batman de Christopher Nolan, donde debió ganar 45 kilos de masa muscular. Pero algunas de sus mayores transformaciones fueron en The Machinist, donde debió perder 27 kilos y consumir sólo manzana, atún y café, y en American Hustle, donde se comprometió a subir unos 20 kilos de su peso habitual.
+ ¿Christian Bale cambió físicamente para Los crímenes de la Academia?
Su compromiso a la hora de encarnar cada uno de sus personajes lo llevaron a ser cuatro veces nominado a los Premios Óscar, obteniendo el reconocimiento a Mejor Actor de Reparto por The Fighter. Es por esto que Netflix lo eligió para personificar al detective Augustus Landor, un ex policía de Nueva York que profundiza en el oscuro corazón del caso. En esta ocasión, no ha presentado un cambio abrupto en su peso, aunque sí se dejó crecer la barba, cubriendo buena parte de su rostro.