El Secreto del Río es la más reciente apuesta de Netflix por los contenidos originales de México y todo indica que les salió tal cual lo planeaban, pues prácticamente a unas horas de su lanzamiento ya se había convertido en la serie más vista del país y ahora forma parte del top 10 de todo el mundo y te decimos si vale la pena verla.

La historia inicia con la llegada de Manuel (Sicarú), un niño que, por circunstancias que él desconoce, tiene que mudarse con su abuela de Salina Cruz hacia el Istmo de Tehuantepec, donde comienza a aprender zapoteco y las costumbres del lugar, pero también a notar el machismo que reina, a pesar de una gran presencia de población muxe.

Al principio fuerzan a Erik, un niño del pueblo a juntarse con Manuel, sin embargo, poco a poco se dan cuenta de sus similitudes y se desarrolla una amistad que se ve atada de por vida tras un accidente.

Durante la boda del tío de Erik, este intenta abusar de Manuel, cerca de un río (no es ningún spoiler, porque pasa en los primeros minutos de la serie y de ahí se desarrolla todo) y al darse cuenta, Erik ayuda a Manuel a librarse, pero en un forcejeo, el tío termina por caer al río, golpeándose la cabeza con una piedra y muriendo.

Erik y Manuel prometen guardar el secreto y así lo hacen durante toda su vida, hasta que décadas después, todo regresa a ellos, cuando ya son mayores de edad.

¿Vale la pena ver El Secreto del Río?

Para no hacerte el cuento largo, como decimos en México, sí vale la pena ver El Secreto del Río. La historia, de apenas 8 capítulos, presenta una realidad de México a la que vale la pena voltear a ver y si bien tiene momentos tensos, es una serie que entretiene y hasta puede llegar a educar.

En la historia, conocemos más sobre las personas muxes, la cultura de Oaxaca, específicamente del Istmo, y se habla abiertamente de las poblaciones trans y LGBTQ+, que siempre han formado parte de este estado, del sur del país, y de todo México.

La historia, sin caer en la denuncia, también señala los problemas actuales como el machismo, el abuso a menores e incluso la trata de personas, haciendo un recorrido interesante que está lleno de intriga, crimen, pero también comedia y hasta cultura.

¿Todo es perfecto? No, como en cualquier producción, siempre hay cosas por mejorar. A mi parecer, el final parece un poco apresurado y mientras en los primeros capítulos la historia se desarrolla con más intriga y un poco más de lentitud, en los últimos episodios todo se resuelve de manera rápida, cuando en realidad parece que podrían haber desentrañado un poco más esta última parte.

Al haber dejado espacio para más historias, los productores y creadores de la serie no se cerraron las puertas a que la historia pudiera continuar con una temporada más, aunque al tener un cierre feliz, parece poco probable que se desarrolle.

¿Qué calificación le damos a El Secreto del Río?

Del 1 al 10, yo le doy un 8.5. Por otra parte, en sitios como IMDb ha sido calificada con 7.5 de 10 estrellas. En cualquiera de los dos casos, la calificación es positiva. Tomando en cuenta todo lo anterior: sí vale la pena ver El Secreto del Río en Netflix.