Por años, los amantes de The Sandman soñaron con ver a este comic creado por Neil Gaiman adaptado en la pantalla chica o en forma de película. La historia creada en la década del 80 se centra en el soberano del Mundo de los Sueños, Morfeo, que es capturado por un ser humano y esto genera estragos que hacen que los límites entre su mundo y el de los seres humanos se vuelvan un tanto difusos, al punto de que algunos de los súbditos de Morfeo logran escaparse para vivir entre los hombres.

Este viernes llegó a Netflix la primera temporada de la adaptación de The Sandman que cuenta con la supervisión directa del propio Neil Gaiman. Protagonizada por Tom Sturridge, se alejó un poco del material original y con los elementos que tomó de la publicación decidió contar una nueva historia en la que el Corintio es uno de los principales villanos, así como también John Dee (interpretado en el show por David Thewlis, la estrella de Harry Potter). 

Uno de los puntos más importantes a destacar de esta versión de The Sandman es su tono. Si bien está presentada como una serie que busca al público adulto, específicamente por el lenguaje soez que hace que no pueda tener una calificación para menores de edad, el tratamiento visual y algunas resoluciones artísticas y argumentales son bastante inocentes, por momentos bordeando lo kitsch, al mejor estilo Riverdale o El mundo oculto de Sabrina.

El resultado que se obtiene es una producción bastante insulsa, que sin ser el desastre que se podía temer se vuelve aburrida, pasatista. Esto no quiere decir que no haya nada para destacar de esta producción a lo largo de sus diez capítulos. Se puede destacar tranquilamente el episodio en el que John Dee pone en juego el rubí en un restaurante con el que le “abre los ojos” a los clientes que pasan por ahí, pero si hay que destacar al mejor de todos los episodios hay que buscar en la segunda mitad de The Sandman.

+El sonido de sus alas, el mejor capítulo de The Sandman

El episodio que logra sobresalir por encima del resto en la primera temporada de The Sandman es el sexto, titulado “El sonido de sus alas”. Se trata de una suerte de ensayo que deambula entre la vida y la muerte, entre cómo percibimos o nos relacionamos con la muerte y qué hacemos con los días que nos tocan transitar en este plano. Lejos de la estética sobrecargada (con un dudoso CGI) que caracterizó a los otros capítulos, este episodio se vuelve más terrenal, con un ritmo muy bien logrado que saca las mejores interpretaciones de sus personajes. ¿Cuál fue para ti el mejor capítulo?